21 de diciembre de 2024
La defensa del socio de Edgardo Kueider pretende que la causa quede en manos de la jueza Sandra Arroyo Salgado
“La idea general de los letrados que llevan adelante la causa en Buenos Aires es que la investigación vaya a San Isidro”, sostuvo Oscar Bacigaluppe, abogado en Entre Ríos de Daniel “Gonzalito” González
“Pospusimos toda conversación y táctica procesal hasta el momento en que se decida quién seguirá investigando porque es inminente que el Juzgado de Concordia acepte o rechace el pedido de inhibitoria”, mencionó Bacigaluppe.
González es empleado de la Biblioteca de la Legislatura. Y estaba adscripto en el despacho de Kueider. Ambos son de Concordia. Y socios al 50% en la firma Betail SA, propietaria de departamentos y cocheras en un edificio de lujo en Paraná. La Justicia buscó a “Gonzalito” en todos sus domicilios y no lo encontró. El jueves se presentó para “estar a derecho” en el expediente que sigue Arias.
Bacigaluppe destacó que su defendido está como “sospechado” en la causa de Entre Ríos, donde se investiga el enriquecimiento ilícito de Kueider. “No hay imputación concreta contra él – precisó - No se le ha recibido declaración indagatoria. Al que se está investigando es a Kueider. Y han surgido algunos elementos donde, como toda la prensa sabe, González aparecería de alguna manera vinculado (al ex senador) en algunas cosas que yo no sé si son reales o no. No he tenido todavía acceso completo a la investigación de Concordia. Pienso que lo haré el lunes”, indicó.“Como está planteado en la prensa, (González) puede tener vinculación directa con Kueider pero no lo puedo afirmar. No he visto papeles, informes, nada. Sólo hablo por lo que salió en los medios. Si González hubiera colaborado, si de alguna manera hubiera sido testaferro o similar, lo que no me consta ni está reconocido, sería un partícipe necesario de la actividad de Kueider. Ahora, por lo que estoy viendo no tiene nada relacionado con el patrimonio del ex senador, así que hasta el momento no veo vinculación”, apuntó.“Que toda la prensa estuviera presente en sus entradas y salidas (del Juzgado) lo ponía incómodo. Pero se puso realmente nervioso cuando lo interceptan en la cochera. Pensaba que lo iban a detener. Me llamó. Yo hablé con el Fiscal y Arias me dijo que no (sería aprehendido), que era solamente por el teléfono. Y ahí volvió a la normalidad”, precisó.
El abogado porteño Juan Grinberg es otro de los defensores de “Gonzalito”. Cuando su defendido se presentó ante el Fiscal entrerriano, quiso interponer un escrito. “No será tenido en cuenta (en la causa) porque el patrocinio de un profesional del derecho que no tiene matrícula en Entre Ríos no tiene valor”, evaluó Bacigaluppe.