Martes
15 de Abril de 2025
14 de abril de 2025
Tras 12 años, la exitosa escritora nigeriana, cuya obra se publica en más de 50 idiomas, regresa con la novela “Unos cuantos sueños”, en la que narra las historias de cuatro mujeres que cuando emigran a Estados Unidos
Por último está Kadiatou, una empleada doméstica que es la confidente de Chiamaka, que ve como su anhelado sueño de vivir en Estados Unidos se quiebra cuando es víctima de una agresión sexual.
“Creo que el mundo sigue siendo muy opresivo para las mujeres. A las mujeres se las juzga con más dureza cuando son egoístas o tienen ambición”, agrega.
Al principio de la novela, las cuatro mujeres creen que saben lo que quieren de la vida y del amor, pero sus dudas comienzan a crecer cuando surgen los temores de haber perdido oportunidades y se enfrentan a la presión social y al racismo. Pese a todo, se apoyan mutuamente.Contra la “historia única”
La conferencia TED de Adichie en 2012 titulada “Todos deberíamos ser feministas”, la llevó a ser conocida a nivel mundial. La charla recibió millones de visualizaciones en YouTube, su discurso fue retomado por la cantante Beyonce en su éxito “Flawless” e incluso la frase “Todos deberíamos ser feministas” fue impresa en camisetas de Dior.Para Adichie una novela necesita contradecir opiniones y creencias. La escritora también quiere combatir los estereotipos condescendientes sobre África, lo que ella llama la “historia única”, de un continente plagado de enfermedades, conflictos y pobreza.
Una forma de salir del dueloPara Adichie, esto es responsabilidad del gobierno actual, que “no está para nada centrado en la vida de la gente de a pie”.
La obra de esta escritora de 47 años ha sido traducida a más de 50 idiomas y ha ganado varios prestigiosos galardones literarios, incluyendo el Orange Prize por su novela Medio sol amarillo en 2006 y el Premio del Círculo de Críticos Nacional del Libro de Estados Unidos por su obra Americanah en 2013.“Solamente cuando estaba casi terminando me di cuenta: ‘Dios mio, ¡habla sobre mi madre!”, relató en una entrevista en febrero al diario británico The Guardian.
“Creo que mi madre me ayudó”, dice . “Creo que ella dijo: ‘tengo que hacer que mi hija vuelva a escribir para que no se vuelva completamente loca por el duelo’”.“Esto ha hecho que mi escritura sea diferente. Porque cuando uno ve el mundo de forma diferente, lo que crea se transforma en algo distinto”, afirma.